24 Julio de 2020
México.- Las grandes producciones hollywoodenses retrasan su llegada y dejan con pocas opciones a los cines mexicanos para lo que resta del año. Serían entonces los títulos considerados medianos y pequeños los que ocupen las salas para atraer público, coinciden integrantes de la cadena productiva nacional.
«Scooby Doo», «Wonder Woman 1984», «Bill & Ted face the music» y «Top gun: Maverick», aparecen en una lista tentativa de lanzamientos de los llamados blockbuster, quedando fuera otras como «Bob Esponja», «El conjuro 3» y «Godzilla vs Kong».
En contraparte, se preparan producciones mexicanas e internacionales que normalmente salen con un menor número de pantallas (entre 50 y mil, esta última equivale es cinco veces menor que una producción de Estados Unidos), como «Amores modernos», con Ludwika Paleta; «Cuidado con lo que deseas», con Fernanda Castillo, y «Me casé con un idiota», con Alfonso Herrera.
«Afortunadamente el tamaño de las producciones que se quedaron sin estrenar es muy variada y se está pensando en que sean las más medianas y pequeñas las que vayan a las salas de cine abiertas, esa sería la estrategia», dice Tábata Vilar Villa, directora de la Cámara Nacional de la Industria Cinematográfica.
«Pero es un territorio desconocido, podemos abrir un fin de semana y luego se cierran por el cambio del semáforo epidemiológico —regresó de amarillo a naranja—, como ocurrió ahora que tuvieron que cerrar en Veracruz, San Luis Potosí e Hidalgo», expresa.
Hasta el domingo pasado, sólo el 16% de salas existentes en México se encontraban abiertas. Desde mayo, cuando reabrieron algunas y hasta el pasado día 19, se habían proyectado 68 títulos, de los cuales alrededor de una decena son estrenos.
Esta tendencia también se ha visto en el mundo. En Japón se ha recurrido a clásicos como «Ben-Hur», «El Mago de Oz» y «Al este del Edén», para atraer al público, mientras que en España, tras la reapertura a finales de junio, el filme de Giuseppe Tornaore, «Cinema Paradiso», tuvo proyección en 150 salas.
Ante la falta de producciones de Hollywood, en Francia se han beneficiado filmes nacionales como la comedia Tout simplement noir y How to be a good wife (Manual de la buena esposa).
Invierten estrategia. Geminiano Pineda, al frente de Cine Caníbal, decidió estrenar «Vigilando a Jean Seberg» y «Queen y Slim: los fugitivos».
Relata que normalmente se estrenan cintas en las ciudades que tienen mayor población, pero ahora es al revés.
«Resulta algo interesante hacerlo así, esto es con la intención también de ayudar a los cines y autocinemas para que ellos también puedan compensar esta pérdida tan grande en general para todos», apunta.
Vilar Villa prevé que en general las películas se sostendrán más tiempo en pantalla, al tener las salas hasta ahora sólo un aforo de 30%. Esto querría decir que se requeriría un periodo tres veces mayor de exhibición, para llegar a los números normales alcanzados.
En 2019, México fue el cuarto país con más boletos vendidos en el orbe (352 millones), abajo de China (mil 650 millones), India (mil 514) y Estados Unidos (mil 170 millones).
«Las dos empresas (Cinépolis y Cinemex) han hablado de hacer promociones importantes para que la gente se anime a volver al cine, lo que piden es al menos quedar tablas (en inversión y ganancias), esa es la expectativa que se tiene, que abrir los cines no salga más caro que permanecer cerrados», apunta.
Alfonso López, de la distribuidora independiente Alfhaville —que tiene detenidos seis estrenos, entre ellos las mexicanas Ocho de cada diez y Con el diablo entre las piernas, reciente cinta de Arturo Ripstein—, sabe que la publicidad será un reto, ante la falta de recursos obtenidos en los últimos cuatro meses.
«Los exhibidores van a recurrir al cine independiente para los espacios que haya, pero también es que mientras no haya certeza mayor en cuanto a la salud pública, se irán improvisando los pasos a dar».