13 Diciembre 2021
México.- La muerte de Vicente, pone fin a la época dorada de la música ranchera, género que trasciende lo puramente artístico para expresar una manera de sentir la vida, como la que protagonizó «El Charro de Huentitán», que se apagó a los 81 años.
«Quiero ver otra vez tus ojitos de noche serena». Con esta canción que Vicente interpretaba con Pedro Vargas en el popular programa mexicano «Siempre en Domingo», partió El Chente. Con él se cierra el ciclo de grandes intérpretes de la música mexicana que dejan un legado incomparable, como Jorge Negrete, Pedro Infante o Javier Solís.
Fernández, era uno de los mejores intérpretes de la canción popular mexicana, poseedor de portentosa voz que trufaba con agudos y melismas que hacían recordar a Antonio Aguilar.
Su partida deja un inmenso repertorio de temas que él interpretaba ´a grito herido´ y una herencia vocal a varios de sus hijos, Alejandro.
ENTRE CORRIDOS Y AJÚAS
Los «ajua» y los «ay, ay, ay» identificaban la voz del Chente, los lamentos que salían de la garganta de Antonio Aguilar, con quien compartía la pasión por caballos. De la pasión por animales de ambos dan testimonio temas como «Caballo Blanco», «El Alazán y el Rocillo».
Cuando «El Charro de México» murió, expertos de música ranchera voltearon sus ojos hacia el último representante de la época dorada de cantantes con sombrero ancho, pantalones con flecos que se hacían acompañar por un gran mariachi: Vicente.
JAVIER SOLÍS
Representante de esa gran estirpe de cantantes de la música mexicana fue también Javier Solís, dueño de una voz de terciopelo con la que cantaba «Sombras nada más» y «En tu pelo». Solís se convirtió en «El Rey del Bolero Ranchero» y llegó a cautivar con su cualidad vocal al propio Frank Sinatra.
Vicente también anduvo tras los pasos de Solís. El Chente solía contar que en ocasiones acudía a compañías para pedirles oportunidad, pero le cerraban la puerta argumentando que ya tenían a Javier Solís.
«EL ÍDOLO DEL PUEBLO», LA INSPIRACIÓN DE CHENTE
Pedro Infante, conocido como «El Ídolo del Pueblo», fue uno de los cantantes que catapultó la música ranchera más allá de México gracias a los más de 300 temas interpretados con una voz incomparable y también al medio centenar de cintas.
Infante protagonizó brillante carrera, que concluyó en 1957. Pedro fue una de las primeras influencias cuando a los ocho años Vicente Fernández recibió su primera guitarra.