1º de diciembre de 2017
México.- En 2030, el 95 por ciento de jóvenes Iberoaméricanos podrían dejar de ser competitivos en el mercado laboral, pese a que en países como México hay más interesados en estudiar carreras en el campo de la ciencia, tecnología, ingeniería y matemáticas, de acuerdo con estudios de la firma Pinion.
La empresa precisó que datos de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE), México está cinco puntos porcentuales arriba que el promedio de las naciones miembros en cuanto a estudiantes que ingresan a carreras enfocadas a la innovación y uso de la tecnología.
Sin embargo, destacó, eso no garantiza que las generaciones que salen sean suficientemente competitivas, pues no tienen la misma formación académica, emprendedora y de innovación que estudiantes de otras partes del mundo, lo que deja en desventaja a los estudiantes mexicanos en un mundo globalizado.
De ahí que la compañía resaltó la importancia de desarrollar contenidos y herramientas tecnológicas de programación y diseño, así como de robótica para formar profesionistas con habilidades que resuelvan problemas.
En un comunicado informó que para lograr una mejora en la calidad de los estudiantes, propone una Cultura Maker, la cual se basa en un pensamiento de diseño, en el que los alumnos deben investigar, diseñar programar y comunicar.
Respecto a este cambio de enfoque en la educación el co-fundador y CEO de Pinion Education, Rodrigo Assael, dijo que el uso de las tecnologías «va más allá del manejo de software o algo ya creado».
“El mundo está cambiando aceleradamente y nos dimos cuenta que las habilidades tecnológicas en niños y jóvenes van más allá del uso de un software de paquetería o incluso de la robótica utilizada de forma aislada; es indispensable brindarles más herramientas», indicó.
Subrayó que en «Pinion ayudamos a las escuelas y al docente a enseñar a sus alumnos a resolver problemas cotidianos diseñando tecnología”.
En ese sentido, anotó que para preparar a estudiantes del futuro es importante enseñar como si ya se estuviera viviendo en él y desarrollar en el alumnado la capacidad para resolver problemas responsablemente.