9 de febrero de 2018
Por Andrés Beltramo Álvarez
Ciudad del Vaticano.- Para promover un debate creativo sobre la relación entre espiritualidad, cine y arte sacro, el prefecto de la Secretaría de Comunicación del Vaticano, Darío Edoardo Viganó, llegará a México el lunes próximo.
Invitado por la Universidad de Monterrey (UDEM), en el nordeste de México, el clérigo elegido por el Papa Francisco para conducir la reforma de los medios en la Santa Sede, dictará tres conferencias en el marco del 20 aniversario de la Cátedra de Arte Sacro de esa casa de estudios.
“Tendré tres conferencias, la primera será sobre el cine en relación a las sagradas escrituras y las representaciones del cine cristológico, pensando –por ejemplo- en las influencias de Franco Zeffirelli (director de Jesús de Nazaret)”, explicó Viganó, en entrevista con Notimex.
“La segunda se centrará en la capacidad del cine de ser un relato artístico que abre caminos hacia lo sagrado y la tercera es sobre las películas de autor”, añadió el clérigo italiano, apasionado desde siempre de cine y artes audiovisuales, exdirector del Centro Televisivo Vaticano.
Entre otras cosas, proyectará a estudiantes e interesados una parte del filme-documental “Caravaggio, el alma y la sangre”, que este mes llegará a las salas en Italia y cuya dirección corrió a cargo del mexicano Jesús Garcés Lambert.
Viganó subrayó el trabajo de este cineasta que no sólo logró una reconstrucción documental sobre la vida del artista Michelangelo Merisi da Caravaggio (1571-1610), sino que también pudo plasmar sus propias sensaciones.
“Es interesante porque es muy empático. Fue muy bien filmado, el director hizo un enorme trabajo”, precisó sobre la pieza cinematográfica que será proyectada a la comunidad universitaria el 15 de febrero próximo, al mediodía.
El prefecto vaticano reconoció la importancia que han adquirido los directores mexicanos de cine en los últimos años y aseguró que los cineastas suelen estar muy influenciados por el contexto histórico en el que viven, como ocurrió en la época del neorrealismo italiano.
“¿Por qué existió este período en el cual Italia supo expresar una gran escuela de cine que hoy no logra igualar? Porque los momentos históricos ofrecen mucho al director, al guionista. A veces se viven realidades de precariedad que empujan a conquistar esas situaciones”, explicó.
“Probablemente en estos momentos con gran deseo de cambiar, de dar vuelta a la página, de construir una esperanza y un futuro mejor, los directores saben escuchar mucho a los hombres y las mujeres de la calle, pueden mirar con gran atención lo que está ocurriendo y, por lo tanto, tienen modalidades de relato que saben interceptar las expectativas del público”, siguió.
Reconoció que México en la actualidad vive una “efervescencia de cine alternativo”, y citó como ejemplo el festival “Filmar lo Inefable”, que se lleva a cabo desde hace algunos años en Guadalajara, Jalisco, y logra unir a directores experimentados con jóvenes realizadores.
“La imagen en movimiento en el arte sacro” es el título oficial elegido por la UDEM para las celebraciones por el aniversario de la cátedra, la única en el mundo que cuenta con un aval explícito del Vaticano.
La ceremonia inaugural de las actividades está prevista para la mañana del 13 de febrero próximo en el teatro de la universidad y contará con la presencia de Rogelio Cabrera López, arzobispo de Monterrey.
Esa misma tarde, Viganó sostendrá un encuentro con estudiantes de los programas académicos de licenciatura en Ciencias de la Información y Comunicación y Producción Cinematográfica Digital.
Un día después, el 14 de febrero, se reunirá con alumnos de la División de Arte, Arquitectura y Diseño; mientras el 15 disertará sobre el tema “Arte sacro en el cine. Nuevos lenguajes y métodos inéditos de contar historias en los documentales del centro de producción audiovisual de la Santa Sede”.
“El cine es el séptimo arte porque tiene la capacidad de transfigurar. Cuando la realidad es transfigurada por la mano del artista, esto se convierte una experiencia de arte que es ofrecida a un público y este puede acercarse, a través de él, a la mirada del artista”, apuntó Viganó.