25 Septiembre de 2019.
México.- Una herida muy antigua y muy profunda, a la que lleva por nombre “Buenos Aires”, es lo que el lector hallará a través de las páginas de Diario negro de Buenos Aires, asegura su autor Federico Bonasso, quien presentó su obra en el Palacio de Bellas Artes.
“Esa herida es resultado de una experiencia de vida: no sólo la perdí como le suele pasar a otros exiliados, sino que a mí me arrebataron la vida y la sigo buscando. Quizá no está en un lugar geográfico, sino dentro de mí”, explica el escritor quien en el acto leyó fragmentos de su libro acompañado por música de piano y bandoneón.
Bonasso escribe desde antes de ser músico y dice, en posterior entrevista a la presentación, que tiene la ambición de encontrar su lugar en el mundo a través de publicar, poco, pero textos de valor. “Es una forma expresiva a la que no voy a renunciar nunca, siempre y cuando lo que produzca sea de interés para los lectores”, añade convencido.
Asevera que no dejará de escribir y enfatiza que promover esta novela se ha convertido “en un proceso de sicoanálisis”, pues sus canciones y mucho de lo que ha hecho se ocupan de esa herida llamada “Buenos Aires”, la cual permanece abierta «hasta Dios sabe cuándo». El tiempo, confía el músico-escritor, podría darle respuesta.
Este libro, que tuvo su primera presentación pública, es una de las novedades editoriales que tienen programadas las ferias del libro que están por iniciar en Oaxaca y en el Estado de México. De ahí, comena Federico Bonasso, a todos los rincones del país, porque México “es un país generoso que desde siempre ha cobijado a los exiliados”.
Luego, y de acuerdo con los planes del autor y la editorial, lo llevará a Buenos Aires, Argentina, porque aspira a que la crítica y el público lector lo califique como “una historia no pequeña ni local, sino enorme y universal”. La novela de Federico Bonasso contó con las glosas y comentarios de Benito Taibo y Mariana H. Bonasso. La sala, llena.