15 de noviembre de 2017
Ante el próximo inicio de la quinta ronda de negociaciones del Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN), la Asociación Mexicana de Empresas de Hidrocarburos (AMEXHI), el Instituto Americano del Petróleo (API) y la Asociación Canadiense de Productores de Petróleo (CAPP) subrayaron que el tratado constituye una historia de éxito.
Por ello, en un comunicado, exhortaron a los negociadores de los tres países a que, si no es posible construir acuerdos para un TLCAN modernizado, se conserve el actual y los considerables beneficios en materia energética que implica para los tres países.
El presidente de AMEXHI, Alberto de la Fuente, destacó que «a medida que avanzamos en el proceso de modernización vemos posiciones extremas que no benefician a ninguno de los tres países, por lo que es fundamental que los negociadores alcancen acuerdos que preserven los impactos positivos del TLCAN y reconozcan la importancia que la integración energética tiene para la productividad y competitividad de la región».
Por su parte, el presidente y director general de API, Jack Gerard, subrayó que el TLCAN ha sido una historia de éxito para la seguridad energética de América del Norte al permitir flujos eficientes de energía lo que genera crecimiento económico, inversiones y creación de empleos en Estados Unidos.
Jack Gerard estimó que «Estados Unidos deben mantener su compromiso con el TLCAN y con la protección que ofrece a trabajadores y negocios estadounidenses para continuar beneficiando a los consumidores y avanzando el liderazgo energético de nuestra nación en el mundo».
En tanto, el presidente y director general de CAPP, Tim McMillan, expuso que desde que el TLCAN fue creado en 1994, las economías de Canadá, Estados Unidos y México han estado entrelazadas.
«El acuerdo ha sido, y continúa siendo, mutuamente beneficioso, con el potencial de crear nuevas oportunidades para incrementar nuestras relaciones comerciales a través de Norte América. El TLCAN es importante para asegurar la autosuficiencia y seguridad energética de nuestro continente».
Las tres organizaciones representan a los sectores de petróleo y gas natural en México, Estados Unidos y Canadá, y entre las tres cuentan con más de 750 compañías del sector hidrocarburos en América del Norte entre sus miembros.
AMEXHI, API y CAPP coinciden en su rechazo a propuestas como la cláusula de expiración de cada cinco años (conocida como Sunset Clause) y aquélla que señala que los mecanismos de solución de disputas entre los Estados y las empresas pueden ser opcionales, dado que ambas debilitarían la estabilidad y el grado de protección a las inversiones de largo plazo.
Las tres organizaciones confiaron en la nueva ronda, los equipos de negociación consideren que México, Estados Unidos y Canadá se benefician por igual en materia de energía con el TLCAN.
Los organismos manifestaron que la renegociación debe perseguir tres objetivos esenciales: incrementar la actividad económica en la región mediante el libre flujo de inversiones, bienes y servicios, así como el libre acceso al mayor número de mercados.
En segundo lugar, asegurar que el TLCAN siga como ejemplo de trato justo y equitativo, y fomente prácticas no discriminatorias para lo que es necesario mantener y facilitar el uso de los mecanismos de protección de inversiones.
Y en tercer lugar, promover el acceso a energía asequible para los consumidores de los tres países y aumentar la seguridad energética regional.