5 de febrero de 2018
Washington.- La Casa Blanca desestimó el desplome de hoy en la Bolsa de Valores de Nueva York, al insistir en que los fundamentos de la economía estadounidense se mantienen fuertes y que este descalabro no detendrá el repunte que ha impulsado el recorte de impuestos.
En un comunicado luego de la caída bursátil, la vocera presidencial Sarah Sanders omitió toda referencia a la caída de 1,175.28 puntos (4.61 por ciento) del índice Dow Jones, la peor en la historia del mercado de valores, y que borró por completo las ganancias acumuladas este año.
“El enfoque del presidente (Donald Trump) está en nuestros fundamentos económicos de largo plazo, que se mantienen excepcionalmente fuertes, con un crecimiento económico fortalecido en Estados Unidos, bajo desempleo histórico y crecientes salarios para los trabajadores estadounidenses”, dijo.
Sanders aseguró que el recorte de impuestos impulsado por Trump, así como las reforma regulatorias “mejoraran aún más la economía de Estados Unidos y continuarán elevando la prosperidad para los estadounidenses”.
El desplome del índice Dow Jones fue atribuido al temor entre los inversionistas de un repunte en la inflación y, en consecuencia, de un incremento en las tasas de interés de referencia, lo que podría encarecer el financiamiento para las empresas.
El Dow Jones terminó la jornada en 24,345.68 unidades; en tanto que el indicador Standard & Poor’s retrocedió 113.19 puntos (4.10 por ciento) para colocarse en 2,648.94 puntos; y el Nasdaq retrocedió 273.42 puntos (3.78 por ciento) para cerrar en 6,967.53 puntos.
Antes de esta jornada, la peor caída del Dow Jones en términos de unidades ocurrió el 29 de septiembre de 2008, cuando el indicador disminuyó 777.68 puntos, 6.98 por ciento en esa ocasión, lo que marcó el inicio de la recesión económica de Estados Unidos.
La peor caída en términos porcentuales del índice sucedió en 1987, cuando el Dow Jones se desplomó 22 por ciento.