7 de febrero de 2018
Ciudad del Vaticano.- El Papa emérito Benedicto XVI, quien se encuentra retirado de la vida pública desde hace casi cinco años, aseguró que se siente un “peregrino a casa” en el último tramo del camino y agradeció las muestras de afecto que “jamás habría podido imaginar”.
Joseph Ratzinger plasmó estas palabras en una carta enviada al periódico italiano “Il Corriere della Sera”, en la cual se dijo conmovido porque muchos lectores desean saber cómo transcurre el último periodo de su vida.
“Puedo sólo decir al respecto que, en la lenta disminución de las fuerzas físicas, interiormente estoy peregrinando hacia Casa”, escribió en la misiva, redactada a computadora en italiano y firmada a mano con letra pequeña.
Añadió que considera una “gran gracia” para él estar rodeado, en este último tramo de camino que calificó “a veces un poco cansador”, de un amor y una bondad tales que jamás lo habría podido imaginar.
“En este sentido, considero también la pregunta de sus lectores como acompañamiento por un tramo. Por esto no puedo hacer otra cosa que agradecer, en el asegurar de parte mía y de todos ustedes mi oración. Saludos cordiales”, apuntó.
Benedicto XVI, de 90 años, se encuentra alejado de la vida pública desde el 28 de febrero de 2013, cuando entró en vigor su renuncia al pontificado presentada, de manera sorpresiva, el 11 de febrero anterior.
Desde el 2 de mayo de ese mismo año reside en el convento “Mater Ecclesiae”, ubicado en los jardines vaticanos, donde reza, lee y recibe eventualmente algunas visitas, entre ellas la del Papa Francisco.