18 de junio de 2018
Caracas.- Venezuela anunció hoy que se niega a participar en un procedimiento impulsado por Guyana en la Corte Internacional de Justicia (CIJ) en relación a la soberanía del territorio en disputa del Esequibo.
A través de un comunicado de la cancillería venezolana, el gobierno venezolano dijo que insistirá en mantener el diferendo con Guyana dentro del acuerdo de Ginebra, que se mantuvo activo durante 50 años por la búsqueda de una solución y nunca presentó un arreglo.
Sin embargo, la cancillería indicó que una delegación encabezada por la vicepresidenta ejecutiva Delcy Rodríguez, junto con el canciller Jorge Arreaza, asistió este lunes a una reunión convocada por el presidente de la CIJ, Abdulqawi Ahmed Yusuf, en relación con la “demanda unilateral” presentada por Guyana.
«La representación de Venezuela, tras haber presentado sus respetos a tan honorable instancia judicial internacional, ha comunicado al presidente de la Corte, mediante misiva suscrita por el presidente Nicolás Maduro, su decisión soberana de no participar en el procedimiento que pretende incoar Guyana».
La delegación venezolana explicó que la decisión obedece a que «la CIJ carece manifiestamente de jurisdicción sobre una acción planteada unilateralmente por el país vecino, que no cuenta con el consentimiento de Venezuela».
Agregó que esta decisión, informada debidamente a la CIJ, acompaña la posición histórica de Venezuela de «no reconocer jurisdicción a dicha instancia judicial internacional -en ningún caso- y menos para la resolución de esta controversia, en la que Caracas no escatimará esfuerzos en la defensa de sus legítimos derechos sobre la Guayana Esequiba».
«La República Bolivariana de Venezuela aprovechó la ocasión para reiterar a la República Cooperativa de Guyana la invitación a reanudar las negociaciones de buena fe con la más amplia, sincera y mejor disposición para alcanzar el arreglo práctico y satisfactorio para ambas partes que persigue el Acuerdo de Ginebra de 1966», señaló.
Venezuela mantiene el centenario reclamo de la soberanía del Esequibo, un territorio de unos 100.000 kilómetros de extensión con riquezas minerales.
Caracas rechazó que Guyana acudiera a la CIJ, indicando que la solución debe surgir del acuerdo de Ginebra de 1966, el cual dejaba a la Secretaría General de la Organización de Naciones Unidas (ONU) la búsqueda de una solución a través de un buen oficiante.
El acuerdo nunca logró proponer una solución en más de 50 años, por lo que Guyana decidió acudir a la CIJ, pese al rechazo de Caracas.