9 de julio de 2018
México.- El suicidio es un grave problema de salud pública en el país, por lo que es necesario que en la Cámara de Diputados se generen iniciativas de ley para impulsar el conocimiento y tratamiento de padecimientos mentales, indicó el académico de la UNAM, Jesús Quezada García.
Previo a la inauguración del Segundo Parlamento Mexicano de la Juventud, integrado por 300 participantes de todo el país, se realizó en el Palacio Legislativo de San Lázaro la conferencia “Prevención del suicidio en jóvenes”, a cargo de expertos en esa materia.
El académico de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM) y especialista en psiquiatría, Jesús Quezada García, destacó que en México no hay una cultura de atención a este problema, además, uno de cada ocho intentos de quitarse la vida se logra.
Advirtió que este problema se presenta principalmente entre las mujeres, pero que son los hombres quienes generalmente lo consiguen, por lo que se debe atender de manera integral, además de tomar en cuenta los factores que lo provocan, como el alcoholismo, el abuso sexual, el bullying y los embarazos a temprana edad.
El experto indicó que los jóvenes son quienes más intentan el suicidio, por lo que “es preocupante que se destinen pocos recursos económicos y humanos al área de la salud”.
A su vez, la consultora psicopedagógica, Blanca Gil Corona, dijo que en la juventud el primer factor son los conflictos de pareja y las consecuencias del rompimiento, ya que de acuerdo con el Instituto Nacional de las Mujeres, 70 por ciento de los noviazgos de chicos de 15 y 25 años de edad son violentos.
Insistió en que se necesitan medidas preventivas para confrontar el problema, además de que no existen buenos servicios de salud para atender a los suicidas, o bien se encuentran en las grandes ciudades.
Gil Corona puntualizó la importancia de destinar más presupuesto para atender dicha situación y para apoyar a las familias e instituciones educativas. “También hay un gran déficit de psiquiatras que acompañen los tratamientos; en muchos casos los maestros de clases son quienes se percatan de dichas tendencias, pero no tienen elementos para prevenirlas”, agregó.
Explicó su preocupación por la poca capacitación y la desinformación que hay al respecto, ya que las personas que no logran quitarse la vida son estigmatizadas, al igual que su familia.
Respecto a la depresión, detalló que 61 por ciento de los casos no se atienden correctamente, además de que sólo la mitad de quienes intentan quitarse la vida reciben cuidados posteriores.
La especialista manifestó su preocupación por la poca capacitación y desinformación que existe sobre este importante problema de salud. “El suicidio y la depresión tienen múltiples caras, por lo que es muy importante buscar ayuda profesional”.