13 de julio de 2018
A la vista de las acciones en las que, aunque de manera poco puntual aún, es previsible que Andrés Manuel López Obrador intente sustentar su comprometida lucha contra la corrupción e impunidad, no son pocas ya las versiones según las cuales el gobierno estaría evaluando la implementación de acciones orientadas a cancelar o al menos “atemperar”, dicen, la generalizada percepción social de que ambos males alcanzaron en la actual administración un nivel nunca visto.
En las últimas horas, efectivamente, la especie de que el presidente Enrique Peña Nieto estaría valorando “un par de propuestas de acción en tal sentido” que habrían sido colocadas sobre su mesa de trabajo, en la residencia oficial de Los Pinos, tras el espectacular triunfo del tabasqueño en los pasados comicios, no sólo ha ganado fuerza sino que, cada vez con mayor frecuencia, aporta nombres y expedientes específicos que, en su momento, fueron tema reiterado en las pasadas campañas: Odebrecht, la llamada Estafa Maestra y, aunque parecía olvidado, el socavón en el llamado Paso Express de la autopista Acapulco-México que, huelga recordar, costó la vida a dos inocentes.
En ese marco, y aun teniendo en mente la reiterada oferta del mandamás en el triunfante Movimiento Regeneración Nacional (Morena) de que nada haría en contra del jefe del Ejecutivo o sus antecesores, que su gestión no haría del “cobro de facturas” un objetivo prioritario ni de una eventual “cacería de brujas” una constante, es que los nombres de algunos actores relevantes del sexenio han comenzado a mencionarse, como lo fueron ya, insistamos, en otro momento: Emilio Lozoya Austin, ex de Pemex; Rosario Robles Berlanga, antes en Sedesol y ahora en Sedatu y, entre otros, Gerardo Ruiz Esparza, de Comunicaciones y Transportes…
Y todo, en el entendido de que si bien el asunto podría estar siendo valorado como una operación con propósitos esencialmente mediáticos y de percepción social, lo cierto es que en cualquiera de los casos citados, y algún otro que en su caso pudiera ser considerado, el objetivo primero sería esclarecer los mismos, hacer justicia y, eventualmente, contrarrestar, como hemos dicho, la imagen negativa que, con más o menos razón, se ha construido del gobierno en proceso de cierre y que, se sabe, fue una de las banderas utilizadas en el pasado proceso electoral que más resultados dio a quienes la enarbolaron.
Huelga decir que, de avanzar las cosas por la vía mencionada, ello deberá explicitarse en los próximos días, pues, a decir de quienes aseguran contar con información dura, la concreción-cierre de los asuntos deberá darse, necesariamente, previo el arribo del nuevo gobierno.
Al tiempo entonces…
ASTERISCOS
* Nada hoy llamará más la atención de propios y extraños que la inusual reunión entre Andrés Manuel López Obrador y los suyos —Marcelo Ebrard y Olga Sánchez Cordero— con la misión trumpiana que, liderada por Mike Pompeo, Steven Mnuchin y Jared Kushner, podría definir el futuro de la (ahora) nada tersa relación con la administración estadunidense…
* Tal como se previó desde un primer momento, la estúpida decisión de expulsar a los senadores Ernesto Cordero y Jorge Luis Lavalle y a la exdiputada Eufrosina Cruz, que un día antes de la elección tomó la Comisión Intrapartidista de Orden y Justicia de Acción Nacional, seguirá “haciendo ruido” al interior del otrora partido de la gente bien. ¿En verdad no entienden?
* Diseñado con tasas preferenciales y beneficios especiales para la mujer que labora de manera formal, es madre y jefa de familia, el Crédito Mujer Fonacot del que en menos de un año se han dado 264,232 por más de mil millones, alcanzará a Mujeres Líderes por la Vivienda, de Mariel Zúñiga, que firmó ya el convenio respectivo con Alberto Martínez Baranda, del Instituto.
Veámonos el domingo, con otro asunto De naturaleza política.
Twitter: @EnriqueArandaP