22 de mayo de 2017
Ahora sí que contra las cuerdas…, merced a la incapacidad y/o indolencia evidenciada en el manejo de la licitación IFT-4, y confrontado con el gobierno federal, con la Secretaría de Comunicación y Transportes (SCT) de Gerardo Ruiz Esparza en concreto, el Instituto Federal de Telecomunicaciones de Gabriel Contreras Saldívar deberá iniciar, ésta misma semana, el diseño de la estrategia orientada a resolver de fondo y, más, a salvar cara… tras ser exhibidos por accionistas de Tecnoradio, S.A. de C.V la firma que, con engaños, logró erigirse como la gran ganadora del referido concurso y, adicionalmente, garantizarse un “premio millonario” con cargo al erario.
Y esto, no sólo porque la IFT-4 sigue en proceso –“no ha concluido”– y sus promotores, aún después de la compleja situación técnico-jurídica causada por el aparentemente indebido (¿ilegal?) actuar de la firma que preside Alí Eduardo Bañuelos –vinculado indirectamente por afinidad y consanguinidad en tercer grado, al poderoso grupo Radiorama de Javier Pérez de Anda, lo que de manera deliberada ocultó-, deben dictaminarla sino, también, para buscar reducir el grave daño que el escándalo mediático suscitado tras publicitarse las irregularidades citadas, causó ya a la imagen y credibilidad de una instancia que, de manera reiterada, ha colocado su autonomía y profesionalismo como garante de sus decisiones, no pocas de ellas polémicas…
Esta misma semana entonces, apenas volver al país, Contreras Saldívar deberán abocarse al estudio y definición de, entre otras cuestiones, qué hacer respecto de las 37 frecuencias radiofónicas “ganadas” por el hasta entonces misterioso grupo Tecnoradio que ofreció por las mismas algo más de 280 millones de pesos, “una cantidad que nadie en el medio pensó siquiera pudieran alcanzarse…”; qué hacer con el falaz grupo “nuevo entrante” de Bañuelos y socios respecto de los cuales el propio Ifetel, en su comunicado del pasado martes, aseguró podría emprender acciones “por la responsabilidad civil o penal en que haya podido incurrirse, atendiendo a la naturaleza de los hechos” y, finalmente, cómo abonar a la recuperación de la imagen y credibilidad perdidas.
Es verdad que, en sus propias bases, la licitación ahora en entredicho, prevé que ante el incumplimiento de la oferta por una frecuencia en concreto por partir del ganador, quienes hubieran apostado por ella sin ganar, podrían reactivar sus posturas y optar por ellas (siempre y cuando previamente hubieran querido mantener su interés). ¿Existen posturas alternas?¿son económica y/o jurídicamente viables?, ¿están en disposición sus promotores originales?, habría que verlo o, en su defecto, explorar la posibilidad de cancelar la IFT-4, total o parcialmente, y dejarla para otro momento…
El asunto no es en forma alguna menor. Menos aún, cuando se cobra conciencia plena de que lo que está en entredicho es el vehículo creado por el Estado para posibilitar una mayor y más equitativa competencia en uno de los sectores clave, estratégico de la economía actual y futura…
Asteriscos
* Al tiempo que en la catedral, donde fue artera y sacrílegamente atacado, jóvenes oraban por la recuperación del sacerdote José Miguel Machorro, la Comisión Mexicana de Derechos Humanos del penalista Abel Flores exigió un nuevo dictamen orientado a revertir la (insostenible) inimputabilidad de su agresor, el potosino Juan René Silva y “priorizar (en este caso) a la víctima, cual es el deber de la justicia”…
* A la vista el último reporte sobre desocupación, según el cual la tasa de desempleo está ahora en su más bajo nivel del sexenio y más, destaca lo dicho por Emilio Gamboa Patrón, coordinador senatorial priista que, amén explicar el asunto como resultado de las reformas estructurales, destaca que la misma compara con la de Japón, lo que no es poco…
Veámonos el miércoles, con otro asunto De Naturaleza Política