8 de agosto de 2018
Ni liderazgos sólidos y confiables ni, menos, perfiles que permitan ver con optimismo el futuro de Acción Nacional…
Ésa, no otra, es la percepción de la realidad partidista que parece estarse imponiendo entre la militancia y simpatizantes de Acción Nacional que, a la vista el arranque del Consejo que marcará el inicio del proceso de sucesión de su actual dirigencia, sigue preguntándose cómo y con quiénes (al frente) deberá emprenderse la reconstrucción-refundación del otrora partido de la gente decente, tras los desastrosos resultados logrados, en alianza con PRD y MC, en las pasadas presidenciales.
Parecería que el paso y actuar antidemocrático del gestor y principal impulsor de la antinatural alianza suscrita con perredistas y emecistas (que acabó por llevarles “al peor de los mundos…”) y, finalmente, su imposición como candidato presidencial de Por México al Frente, Ricardo Anaya Cortés, no sólo dejó atrás principios y valores del blanquiazul, sino que también acabó arrasando con cuanto liderazgo osó oponerse o criticar al queretano y a quienes, con él, se hicieron con el control del PAN… situación, esta última, que prevalece aún ahora.
El hecho mismo de que, al margen de consideraciones de otra índole, personajes como los senadores Jorge Luis Preciado o Ernesto Ruffo Appel, el exgobernador Carlos Medina Plascencia, Francisco Búrquez Valenzuela o, incluso, el poblano Rafael Moreno Valle levanten hoy la mano para sustituir al frente del Comité Ejecutivo Nacional al anayista non Damián Zepeda evidencia la carencia de perfiles o, al menos, de liderazgos jóvenes forjados al interior del panismo.
Y ello, no porque el resto de quienes han levantado la mano o han sido mencionados con insistencia: Roberto Gil Zuarth o el gris-gris Marko Cortés —el supuesto caballo negro Héctor Larios Córdova, incluso—, tengan méritos sobrados para aspirar a la posición, sino, esencialmente, porque estos últimos, al menos, pueden presumir conocimiento y/o reconocimiento de parte de la militancia nacional, de trayectoria en múltiples posiciones que, hipotéticamente, les habrían preparado para el cargo…
A la vista tal realidad, entonces, es que se antoja observar con especial atención lo que deberá ocurrir en el Consejo de sábado y domingo en que, por otra parte, se prevé que los consejeros asistentes elijan y no sólo validen la lista de integrantes de la Comisión encargada de llevar adelante el delicado proceso que dotará al blanquiazul de la nueva dirigencia que deberá atender el generalizado reclamo de reconstruir y/o refundar (lo que queda) de la única alternativa partidista de centroderecha y (potencialmente) verdaderamente democrática existente…
Asteriscos
* Evidencia clara del (pobre) nivel de nuestra clase política y quienes de ella viven, la (más que) festiva acogida que el siempre polémico gobernador panista de Chihuahua, Javier Corral Jurado, antilopezobradorista declarado él, dio al virtual presidente electo, quien viajó hasta la violentísima Ciudad Juárez para encabezar ahí el primero de los Foros por la Paz anunciados en campaña.
* Otra: luego que diputados de Morena tomaron los accesos al Congreso veracruzano para impedir que sus pares de PRD y PAN validaran a 12 magistrados (carnales) del Poder Judicial Estatal que, supuestamente, habrían acordado con el exelbista-priista gobernador Miguel Ángel Yunes que, ante la protesta, anunció cedería tal potestad a su sucesor, Cuitláhuac García.
* ¡Vaya duro golpe!, presumiblemente sin querer queriendo, el que el Tribunal Electoral del Poder Judicial, de Janine Otálora, propinó a los impresentables Chuchos perredistas, a Jesús Zambrano en particular, quien, tras confirmarse que Juan Zepeda será senador de primera minoría, vio cancelada su posibilidad de “colarse”, vía pluri claro, a la Cámara alta…
Veámonos aquí viernes, con otro asunto De naturaleza política.
Twitter: @EnriqueArandaP