Domingo 9 de enero de 2022
Nuevo récord en contagios (30,671),
pero… ¡no pasa nada!
Luego que apenas el jueves celebrara que el alza de homicidios dolosos a nivel país había sido contenida ya, y que presumiera que al cierre de 2021 este ilícito se redujo 4.16%, respecto del año anterior, Andrés Manuel López Obrador debió asumir –“implícitamente, si se quiere”, a decir de no pocos– que igual que en otros rubros, el gobierno de la 4T simple y sencillamente carece de resultados y, más allá del discurso, es mucho lo que está quedando a deber a la ciudadanía…
Una decena de cuerpos sin vida dejados a las puertas de las oficinas del (des)gobernador zacatecano David Monreal Ávila y el abandono de 13 más en la zona conurbada de la capital veracruzana, cuatro, y nueve en una carretera al sur del terruño del impresentable Cuitláhuac García Jiménez, que más que gobernar se afana en perseguir a sus opositores políticos, dejaron sin argumentos al tabasqueño que, presumiblemente, deberá dejar de lado aquello de “ahí vamos” en lo que a restituir la seguridad se refiere.
Vale destacar que en los ocho primeros días del año que comienza, entre el 1 y el 8 de enero, no menos de medio millar de mexicanos –casi 70 cada 24 horas, según diversas estadísticas– han perdido la vida en medio de la cruenta confrontación que por el control de vastos territorios libran los distintos cárteles del crimen organizado que, a la vista los hechos, parecen ser los únicos beneficiarios de la cuestionada –¿irrisoria?– política de “abrazos no balazos” implementada por la administración federal con miras a erradicar la violencia que, literal, desangra a México y reconstruir para la ciudadanía la añorada paz social.
Las “alertas” por hechos como los que nos ocupan se encuentran encendidas, tanto en los más diversos ámbitos
–empresarial, universitario, eclesial y más– como a nivel externo, donde se observa con preocupación el creciente deterioro de la situación y los escasos logros del gobierno que, si bien ha ampliado significativamente la presencia y participación de las Fuerzas Armadas –Ejército, Marina y Fuerza Aérea, más la (in)civil Guardia Nacional, claro está– en la atención de problemas y realización de las más disímbolas tareas, poco o nada parece estar exigiéndoles en lo que debiera ser su tarea prioritaria: la preservación de la seguridad nacional y porque así se ha querido en los tiempos actuales, de la paz social…
ASTERISCOS
* No sin dificultades ciertamente, la coalición integrada por PAN, PRD y PRI consumó finalmente el acuerdo para ir juntos en la puja por la gubernatura de Durango a cargo ahora del cuestionado panista José El Primo Rosas Aispuro, dejando al Revolucionario Institucional definir al candidato común que, se especula, será el diputado Esteban Villegas. ¿Así?…
* Y donde las cosas parecen estarse “acomodando” para favorecer al oficialismo es en Quintana Roo, donde el perredismo decidió traicionar a sus aliados de Va por México para, junto con la impresentable franquicia verde, postular a la diputada Laura Fernández, con el único propósito de dividir a la oposición y apoyar así a la cuestionada morena Mara Lezama. ¿O no?…
Veámonos aquí mañana con otro asunto De Naturaleza Política.