8 de julio de 2017
La asambleísta local, Eva Lescas Hernández considera que a partir de este sábado, la Ciudad de México inicia un cambio cultural por el manejo de los residuos, y sus habitantes entrarán en una nueva etapa de autogestión de los residuos sólidos urbanos, lo que fortalecerá el destino final de la basura.
Destacó que en las 32 entidades federativas hay una baja eficiencia de separación; además de falta de concientización, educación e incentivos a la población, «por lo que era urgente un cambio cultural para dejar de consumir menos, reciclar más y colocarnos a la vanguardia en estos temas como Alemania y Dinamarca, países que mejor reducen, reúsan y reciclan la basura».
Al entrar en vigor la norma ambiental NADF-024, los capitalinos, así como empresas, dependencias oficiales, restaurantes, asociaciones e industrias, entre otros, estarán obligados a separar la basura en cuatro categorías: residuos orgánicos; inorgánicos reciclables; inorgánicos no reciclables y de manejo especial o voluminoso.
La diputada del Partido Verde Ecologista de México (PVEM) en la Asamblea Legislativa indicó que a partir del 8 de julio, una vez separados los residuos, habrá un calendario con el cual cada día de la semana se deberán entregar al camión recolector.
Desde ahora, la separación inicia en los hogares y las botellas de PET, latas de refresco, papel, vidrio, cartón, pañales y residuos de alimentos, se deberán separar de diferente manera, al igual que los desechos de mayor volumen como colchones, llantas y muebles.
Reconoció el interés del gobierno capitalino, que ha capacitado a unos 30 mil trabajadores involucrados en el proceso de manejo de los residuos urbanos, con la finalidad de crear toda una estrategia de separación y reciclado de basura.
La asambleísta recordó que en la Ciudad de México a diario cada habitante genera aproximadamente kilo y medio de desechos que se convierten en 13 mil toneladas de basura y cuyo traslado ocasiona un costo millonario al gobierno capitalino.
En el tema del reciclaje, Lescas Hernández destacó la importancia de darle un reúso a los residuos que diariamente se generan en los hogares o en las oficinas, como papel, cartón, empaques, bolsas o vidrio; con el objetivo de reciclarse para la elaboración de nuevos productos.
«Con el cambio cultural que necesitábamos en el manejo de la basura y la nueva norma ambiental NADF-024, la Ciudad de México y sus habitantes daremos un importante paso en la responsabilidad que tenemos de hacernos cargo de nuestros propios residuos», concluyó.