11 de septiembre de 2017
España.- El expresidente del Parlamento Europeo (PE), Josep Borrell, afirmó hoy aquí que la sociedad de Cataluña (noreste de España) está dividida debido al proyecto independentista, y será difícil una solución para superarla.
El también exministro en los gobiernos socialistas de Felipe González (entre 1982 y 1996) habló en el Foro de la Escuela de Negocios Next, con motivo de la publicación del libro “Escucha Catalunya, escucha España”, junto a Francesc de Carreras, Juan José López Burniol y Josep Piqué.
En la conversación junto al periodista Manuel Campo Vidal, expuso de cara a la convocatoria de referéndum independentista del 1 de octubre, se vive “una ruptura política sin apenas respuesta ni política de comunicación del gobierno español”.
La consulta independentista fue anulada por el Tribunal Constitucional pero el gobierno de Cataluña sigue adelante con su convocatoria, algo que Borrell considera que sobrepasa límites legales establecidos.
Lamentó que además de las acciones jurídicas ante el Tribunal Constitucional para tratar de impedir el referéndum, no hay una pedagogía que haga contrapeso a los argumentos de los independentistas que crecen entre la sociedad.
Borrell explicó que como catalán le consta cómo la versión de que pertenecer a España es un accidente para Cataluña, que perdió una guerra en 1714 (en la guerra de sucesión) y que eso les impide desarrollarse, ha ganado terreno entre muchos catalanes.
Recalcó que incluso muchas mentes brillantes en Cataluña, entre ellos economistas, creen que los problemas que tienen son por el hecho de pertenecer a España, y que todo se arregla con la independencia.
“Estamos en pleno Trumpismo, entendido esto en el sentido de que el ciudadano ya sabe que quien le dice esto miente, pero está de acuerdo con él”, dijo sobre lo que se vive estos días en Cataluña.
El político socialista aseguró que es un mito que el pueblo catalán sea solo uno respecto de la independencia, y que el problema no es solo de cara al resto de los españoles sino que hay muchas diferencias territoriales, étnico-lingüísticas y de ideología.
“La división social es lo más difícil de solucionar, porque incluso primero se tiene que resolver la fractura macro, la política, para después resolver la fractura micro que es la de la gente”, consideró.
“La batalla comunicacional la hemos perdido por la incomparecencia de los gobiernos del PSOE (Partido Socialista Obrero Español) y ahora del PP (Partido Popular) de Rajoy”, enfatizó.
Sostuvo que cualquier esfuerzo político de diálogo y de generar una situación diferente por parte del gobierno español “deberá acompañarse de un sistema de información y propaganda tan poderoso como el de contra información del independentismo”.
Borrell agregó que se desconoce lo que pasará con este proceso, pero que tras el 1 de octubre el problema seguirá allí, y se deberá atender los problemas reales y desvanecer los problemas irreales para tratar de tener un diálogo político entre las partes.