11 de diciembre de 2017
México.- Con dos programas especiales, el próximo 14 de diciembre en el Teatro de la Danza, del Centro Cultural del Bosque (CCB), la maestra Ema Pulido celebrará el 40 aniversario de su estudio de danza, considerado una platafrorma de talento nacional en el arte del cuerpo en movimiento.
El primero de ellos será «El amor después de la vida», que se desarrollará a las 17:00 horas; y a las 20:00 horas «Clausura del 40 aniversario del Ema Pulido Estudio de Danza», uno de los pocos espacios independientes que ha logrado sobrevivir y mantenerse como un referente en la formación de nuevas generaciones de artistas escénicos en México.
Un centro formativo que ha encaminado a jóvenes en danza, canto y teatro de manera integral. Además, ha capacitado y entrenado a profesores nacionales y extranjeros para su profesionalización, de la mano de su directora Ema Pulido, pionera de la danza jazz en México y formadora de nuevos públicos para esta disciplina.
“Siento un gran agradecimiento por mis maestros, a los alumnos y a la gente que ha creído en mis proyectos; a mis amigos y enemigos”, comentó la maestra Pulido, quien posee una trayectoria de más de 50 años como bailarina, coreógrafa, docente, creadora escénica y productora.
En entrevista difundida por la Secretaría de Cultura federal, la libertad de expresión ha mantenido a su estudio como un referente en México y le ha dado un sello único. “Estoy abierta a todas las manifestaciones artísticas y a manejar una educación integral con disciplina y amor a la danza”.
Sobre los programas que presentará en el Teatro de la Danza, explicó que el primero es un homenaje a figuras de la danza, la música y la poesía que han dejado una enorme huella después de su partida, como Vaslav Nijinsky, Isadora Duncan, Amalia Hernández, Agustín Lara, Chabela Vargas, Celia Cruz, Elvis Presley, Michael Jackson, Juan Gabriel, Violeta Parra y Jaime Sabines.
Mientras que «Clausura del 40 aniversario del Ema Pulido Estudio de Danza», es un recorrido por la historia de este centro formativo y será interpretado tanto por sus egresados que ya son unos profesionales de la danza, como por alumnos actuales.
“Simplemente busco que los públicos se emocionen con la danza y se identifiquen con ella”.
Inquirida sobre qué sigue, la ganadora de la medalla Una vida en la danza, otorgada por el Instituto Nacional de Bellas Artes, y del Premio Guillermina Bravo por su trayectoria como productora y docente, consideró que: “Motivar y formar a maestros de danza para las generaciones futuras y acentuar la atención en la infancia y la juventud; además de promover nuestros valores como seres humanos”.