12 de octubre de 2017
Bruselas.- El negociador de la Unión Europea para el Brexit, Michel Barnier, no recomendará a los líderes de la mancomunidad abrir las pláticas sobre la futura relación con Reino Unido la próxima semana, por considerar que aún no se ha avanzado lo suficiente en las tres cuestiones esenciales del divorcio.
“No puedo proponer al Consejo Europeo (organismo que reíne a los líderes de los Veintiocho) lanzar discusiones sobre la futura relación”, dijo Barnier tras concluir la quinta ronda de negociación con el representante británico, David Davis, este jueves.
Las dos partes han podido esta semana “aclarar determinadas posiciones”, pero no “hubo grandes pasos” con respecto al futuro de los ciudadanos afectados por el Brexit, la frontera irlandesa y la factura a ser abonada por Londres.
La Unión Europea (UE) no está satisfecha con las garantías ofrecidas por Londres respecto al reagrupamiento familial y a la exportación de prestaciones sociales tras el Brexit.
“Nos parece importante que todo europeo que reside hoy en Reino Unido pueda en el futuro hacer venir a sus padres adonde vive, y lo mismo vale para un ciudadano británico en Europa. De la misma manera, un europeo que vivió años en Reino Unido debe, luego de jubilarse, poder volver a su país con su pensión”, explicó Barnier.
Según el negociador europeo, Londres y Bruselas tienen interpretaciones diferentes de la legislación europea en lo que dice respecto a muchas cuestiones importantes.
Londres también tiene aún que presentar a los europeos su propuesta sobre los fondos que se dispone a abonar al salir de la mancomunidad.
“Reino Unido nos ha dicho que aún no está listo para precisar sus compromisos. Así que no hubo negociación sobre ese tema”, explicó el negociador europeo.