2 de agosto de 2017
A unos minutos que iniciara la comparecencia del jefe delegacional en Tláhuac, Rigoberto Salgado Vázquez, afuera de la Asamblea Legislativa del Distrito Federal (ALDF) prevalece la calma, pese a la presencia de elementos de la Secretaría de Seguridad Pública.
El recinto legislativo ubicado en el cruce de las calles Donceles y Allende permanece fuertemente custodiado por unos 200 policías capitalinos distribuidos entre esas vialidades y la de República de Cuba.
En tanto, el jefe delegacional llegó a la Asamblea desde muy temprano y previo a su comparecencia ante asambleístas, se reunió con la bancada de Movimiento Regeneración Nacional (Morena).
El salón Heberto Castillo, donde se realizará la comparecencia con la Comisión de Gobierno, se encuentra lleno de fotógrafos y camarógrafos, así como asesores de los diputados locales y del propio jefe delegacional de Tláhuac.
Asimismo, personal de resguardo de la Asamblea Legislativa permitió el acceso a habitantes de la delegación, quienes con pancartas demandan «que la paz y tranquilidad lleguen a Tláhuac».
Afuera, en las escalinatas de la Asamblea Legislativa, no hay presencia de ningún contingente ni a favor ni en contra de Salgado Vázquez.