25 Octubre de 2020
México.- Es medio día en el Panteón General de Iztapalapa. En la entrada algunas personas soportan un sol abrazador para poder entrar a dejar flores a sus difuntos en el último día que estará abierto el cementerio.
Sin embargo, el acceso está prohibido, ya que según los guardias solo se permite la entrada para entierros, depósito de urnas y trámites. Aun con ello, al menos una veintena de personas con flores en mano esperan para poder ingresar al cementerio.
Aquí las paredes del panteón sostienen unas coronas y arreglos florales, son de la familia Reyes quienes vienen a sepultar a Rosa María Reyes. Algunos de ellos son los únicos que podrán ingresarán al cementerio, cuenta José Reyes pariente de la difunta.
“Nos dijeron que sólo podían ingresar quince personas, el ataúd y las flores, y nos tendremos que salir, ya que nadie puede estar más tiempo aquí por la contingencia”.
En la entrada una persona con el traje protector y careta recibe a las pocas personas que pueden entrar. Les ofrece gel antibacterial y les da explicaciones. El tumulto de gente que no puede entrar pide explicaciones y observa un panteón desolado, sin flores.
Así transcurre el día en el cementerio, algunas personas resignadas toman sus flores y se marchan, otras esperan. Este año por la contingencia ocasionada por el Covid, pocas serán las tumbas que tendrán ofrenda.