23 de febrero de 2018
Puebla.- Una casa del siglo XVI, ubicada en el Portal Morelos del Centro Histórico de esta ciudad, fue rehabilitada por empresarios para mantenerla como sede del restaurante “Mi Viejo Pueblito”, donde habitantes, visitantes nacionales y extranjeros pueden disfrutar de comida 100 por ciento mexicana.
En entrevista, Alejandro Covarrubias, director de Grupo Plaza, mencionó que hoy también se pueden ver todas las adecuaciones que ha tenido el inmueble durante tres siglos con distintos materiales y características que se usaban en las distintas épocas, de ahí que el inmueble es parte de la historia de Puebla.
“Al ser una casa catalogada como Patrimonio del Centro Histórico, nosotros, antes de tocar cualquier muro, pedimos autorización al Instituto Nacional de Antropológía e Historia (INAH), de ahí que la remodelación fue supervisada por personal de la institución”, acotó al reinaugurar la Casona de «Mi Viejo Pueblito» después del terremoto del 19 de septiembre pasado.
Alejandro Covarrubias expllicó que la restauración les llevó cuatro meses, siguiendo todas las recomendaciones del INAH, por lo que se utilizaron materiales que mantienen viva la historia del lugar.
Subrayó que aprovecharon la crisis del sismo, en donde no se podía pasar al Portal Morelos por las afectaciones del terremoto, de ahí que durante cuatro meses llevaron a cabo la modernización de las instalaciones e infraestructura dando beneficios a los clientes, todo con un estilo mexicano contemporáneo.
“Hacia 1524 el piso de esta casona veía por primera vez la luz, convertido en el mercado de la plaza mayor, actualmente Zócalo de la Ciudad de Puebla, se hizo de esa forma al proporcionar comodidad a los mercaderes y ciudadanos, al ser la zona más importante”, acotó.
El director de Grupo Plaza señaló que la casona se vuelve parte del Portal de las Flores, en donde ofertaban dicho producto, asimismo, en 1852 es llamado el Portal José María Morelos y Pavón en honor al héroe de la Independencia.
Refirió que a mediados del siglo XIX se instaló una imprenta, donde se imprimieron decretos del gobierno hasta 1847, después tuvo otros usos y permaneció muchos años abandonada, hasta que en abril de 1998 fue adquirida por Grupo Plaza para albergar la sucursal de la marca mexicana «Mi Viejo Pueblito».
Los comensales pueden degustar de un rico mole poblano, del Chile en Nogada y del Mole de Caderas, durante sus respectivas temporadas, asimismo de un buen pipián verde, señaló.
El lugar ahora cuenta con un elevador que lleva a la terraza, en donde se encuentra un bar y desde donde se puede admirar la Catedral de Puebla y el Zócalo.
Covarrubias Ramírez mencionó que al restaurante llegan unas siete mil personas al mes, de las cuales un 30 o un 40 por ciento de los clientes son turistas, de ahí, que es una representación clara de Puebla y de los poblanos.
Exhortó a los habitantes, así como al turismo nacional e internacional a caminar el Centro Histórico poblano y tener la confianza de visitar el primer cuadro de la ciudad.
Añadió que el presente año es de consolidación, tras la apertura también que tuvieron del restaurante Casa Barraca, ubicado también en la zona del Centro Histórico.
Sentenció que el objetivo fue mejorar la infraestructura, a fin de brindar un buen servicio a los clientes y al turismo, en donde la capital poblana compite con los Centros Históricos de otras entidades, de ahí la invitación a disfrutar de «Mi Viejo Pueblito» en el primer cuadro de la capital poblana.