8 mayo 2023
México.- El jefe de la agencia de supervisión nuclear de Naciones Unidas expresó su creciente preocupación sobre la seguridad de la central nuclear de Zaporiyia después de que el gobernador de la zona ocupada por Rusia ordenara evacuar una localidad donde vive la mayoría de los trabajadores de la central, en medio de ataques a la zona.
La planta se encuentra cerca del frente y las autoridades ucranianas dijeron que una mujer de 72 años había muerto y otras tres personas habían resultado heridas después de que las fuerzas rusas arrojaran más de 30 proyectiles sobe Nikopol, una ciudad cercana bajo control ucraniano.
Ucrania también ha estado atacando regularmente el lado ruso de las líneas.
“La situación general en la zona cerca de la central nuclear de Zaporiyia se está volviendo cada vez más impredecible y potencialmente peligrosa”, indicó el director del Organismo Internacional de la Energía Atómica, Rafael Grossi, en una advertencia el sábado antes del último reporte de ataques.
“Estoy extremadamente preocupado por los riesgos muy reales de seguridad y seguridad nuclear que sufre la planta”, añadió.
Las declaraciones de Grossi respondían al anuncio el viernes de Yevgeny Balitsky, gobernador nombrado por Rusia para la provincia parcialmente ocupada de Zaporiyia, de que había ordenado la evacuación de civiles de 18 poblaciones en la zona, incluida Energodar, que se encuentra cerca de la central nuclear, la más grande de Europa.
Las poblaciones afectadas estaban a entre 50 y 70 kilómetros de la línea de combates entre Ucrania y Rusia, y Balitsky dijo que Ucrania había intensificado los ataques en la zona en últimos días.
Los analistas llevan meses señalando la región meridional de Zaporiyia como uno de los posibles objetivos de la contraofensiva ucraniana prevista para primavera, especulando con que las fuerzas de Kiev podrían intentar cortar el “corredor terrestre” de Rusia hacia la península de Crimea y dividir en dos a las fuerzas rusas presionando hacia la costa del mar de Azov.
Algunos de los combates más encarnizados se libran en Bájmut, donde las fuerzas ucranianas siguen aferradas a una posición en la periferia occidental.