1 Noviembre de 2018.
Caracas.- Ante la llegada de miles de venezolanos a territorio colombiano por la crisis humanitaria que vive Venezuela, el Grupo de Lima presentó acciones para apoyar a Bogotá, al tiempo que Estados Unidos reiteró su intención de ejercer presión contra el régimen de Nicolas Maduro.
Durante la reunión, que tuvo como sede la ciudad colombiana de Bogotá, los países acordaron facilitar el tránsito y permanencia de ciudadanos venezolanos cuyos pasaportes y documentos de identidad se encuentren vencidos.
El Grupo de Lima, formado hace un año para atender la crisis política en Venezuela, decidió además que los títulos universitarios serán aceptados sin necesidad de ser apostillados.
La agrupación de países decidió que los venezolanos podrán presentar su permiso de permanencia en Colombia hasta el 2 de diciembre de 2018.
El grupo de Lima, conformado por 14 países de América Latina, también aprobó otorgar asilo político en Colombia a los funcionarios venezolanos electos desde 1998 hasta la fecha, que lo soliciten.
El gobierno de Bogotá aseguró este miércoles que de acuerdo con cifras de organismos internacionales, de los más de 2.3 millones de inmigrantes venezolanos que abandonaron el país el 50 por ciento se encuentra en Colombia.
Según datos de la Organización Internacional para las Migraciones (OIM) y el Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Refugiados (Acnur), más de dos millones 300 mil venezolanos han abandonado su país en los últimos años.
«De ellos, cerca de 50 por ciento se encuentra actualmente radicado en Colombia», indicó el gobierno en un comunicado.
Según el jefe de la autoridad migratoria colombiana, entre enero y septiembre de este año más de un millón 52 venezolanos ingresaron al país, mientras que un poco más 676 mil personas salieron hacia terceros países, principalmente Ecuador, Perú, Chile, Estados Unidos y México.
Lo anterior, aclaró, «evidencia la crisis migratoria que está viviendo no sólo Colombia sino la región por culpa de la dictadura presente en Venezuela».
En ese tenor, los coordinadores del Grupo de Lima analizaron en Bogotá posibles acciones a tomar a partir del próximo 10 de enero cuando el presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, inicie un nuevo mandato, informaron fuentes oficiales.
“Hemos hecho un análisis detallado de una amplia gama de opciones frente a lo que va a ocurrir el 10 de enero en Venezuela cuando se renueve el mandato del presidente Maduro”, manifestó en un comunicado el viceministro de Relaciones Exteriores de Perú, Hugo de Zela.
Maduro, que está en el poder desde 2013, fue reelegido presidente el pasado 20 de mayo en unas elecciones no reconocidas por la mayor parte de la comunidad internacional. El próximo 10 de enero de 2019 le corresponde la toma presidencial, sobre la que aún no se han definido acciones en concreto.
También el gobierno de Estados Unidos insistió en la necesidad de mantener, junto a otros países de la región, una campaña de “presión sostenida” para forzar al presidente Maduro, a “volver a la democracia”, liberar a los “presos políticos” y permitir la entrada de ayuda humanitaria.
Un portavoz del Departamento de Estado, Robert Palladino, hizo esas declaraciones durante una rueda de prensa al ser preguntado sobre si Washington desea que el presidente electo de Brasil, Jair Bolsonaro, tenga un papel más activo en las relaciones con el país caribeño.
Sin mencionar al nuevo mandatario brasileño, Palladino dijo: “Hay muchos países que son activos con nosotros, y es una clara mayoría y siempre hay más cosas que podemos hacer. Necesitamos aplicar una presión sostenida sobre el régimen de Maduro”.
Fuente: Notimex.