8 marzo 2024
México.- El presidente Joe Biden convirtió su discurso del Estado de la Unión del jueves en un animado argumento para tratar de conseguir la reelección, y en el que arremetió contra su posible rival republicano Donald Trump por promover “el resentimiento, la revancha y las represalias” y poner en riesgo las libertades, dentro del país y en el extranjero.
Su discurso desde la tribuna de la Cámara de Representantes, pronunciado sólo ocho meses antes de las elecciones generales, fue algo así como una entrevista de trabajo para el presidente más viejo en la historia del país, quien intenta calmar las preocupaciones de los votantes sobre su edad y su desempeño laboral, y marcar un contraste con su casi seguro rival de noviembre. Elevando la voz, lanzó una diatriba contra su predecesor por no defender a los aliados estadounidenses en el extranjero y por acoger conceptos antidemocráticos en Estados Unidos.
“La libertad y la democracia están siendo atacadas, tanto en casa como en el extranjero, en este preciso momento”, dijo Biden, mientras llamaba al Congreso a otorgar su apoyo a Ucrania para defenderse de la invasión de Rusia. “La historia nos observa”.
Biden rápidamente se enfocó en las amenazas al interior del país, haciendo mención del ataque del 6 de enero de 2021 contra el Capitolio federal por parte de simpatizantes de Trump que buscaban revertir los resultados de las elecciones de 2020, y haciendo un llamado a combatir las amenazas a la democracia.
El presidente pregonó sus logros en infraestructura y manufactura, y presionó al Congreso para que apruebe más ayuda para Ucrania, normas migratorias más estrictas y precios más bajos para los medicamentos. También trató de recordar a los votantes la situación que heredó cuando asumió el cargo en 2021, en medio de una pandemia y con una economía en contracción.
El presidente, estaba siendo observado de cerca no sólo por su mensaje, sino por si sería capaz de transmitirlo con vigor y firmeza.
Colaboradores de la Casa Blanca señalaron que Biden intentaba demostrarle a quienes dudan de él que están equivocados, mostrar un lado combativo y tratar de exponer a los republicanos por posturas que cree que no encajan con el país, en lo referente al acceso al aborto, pero también en políticas fiscales y servicios de salud.