31 mayo 2023
México.- La OTAN anunció que reforzará su presencia en Kosovo al día siguiente de los disturbios registrados en el norte de ese país balcánico entre manifestantes serbios y tropas de la fuerza KFOR de la Alianza.
“Hemos decidido desplegar 700 soldados más de las Fuerzas de Reserva Operativa para los Balcanes Occidentales”, declaró el secretario general de la OTAN, Jens Stoltenberg, en una rueda de prensa en Oslo.
Serbia y Kosovo deben dar “pasos concretos para desescalar la situación, abstenerse de llevar a cabo más conductas irresponsables e implicarse en el diálogo facilitado por la Unión Europea, que es el único camino para una paz duradera”, agregó.
Los violentos choques registrados el PASADO lunes entre manifestantes serbios y los soldados de KFOR dejaron más de 50 civiles y 30 soldados heridos en la localidad de Zvecan, al norte de Kosovo.
Los serbios tratan de impedir el acceso a los ayuntamientos de los alcaldes de origen albanokosovar, elegidos en abril pasado en unos comicios boicoteados por la minoría serbia.
Mientras que el alto representante de la UE para Asuntos Exteriores, Josep Borrell, anunció en Bruselas que pretende convocar una reunión de alto nivel para tratar de recuperar el diálogo entre las partes.
“Ya ha habido demasiada violencia. Ahora ya tenemos demasiada violencia en Europa. No podemos permitirnos otro conflicto”, subrayó el jefe de la diplomacia europea, que mostró su esperanza en que su “voz sea escuchada y que la gente se comporte en consecuencia”.
El embajador de EU en Kosovo, Jeffrey Hovenier, responsabilizó al Gobierno kosovar del “ambiente de crisis” en la parte norte del país, informó la emisora Radio Free Europe.
Pristina rechaza por ahora retirar a los alcaldes y la policía especial kosovar de los ayuntamientos, como exigen los serbios -minoría en Kosovo pero mayoritarios en el norte- para poner fin a las manifestaciones.
El pasado viernes la policía kosovar usó la fuerza contra los manifestantes para permitir el acceso de los ediles.
Kosovo, antigua provincia serbia poblada por una gran mayoría de albaneses, proclamó en 2008 su independencia, que Serbia no reconoce.
Ambos países negocian la normalización de sus relaciones sobre un nuevo plan europeo, apoyado por Estados Unidos.