8 julio 2023
México.- La temperatura promedio de la Tierra estableció un nuevo récord no oficial el jueves, el tercero en una semana que ya ha sido calificada como la más calurosa jamás registrada y que, según un destacado científico, podría ser la de calor más extremo en 120.000 años.
Pero también es un récord que ha generado preguntas y advertencias científicas legítimas, tanto que la Oficina Nacional de Administración Oceánica y Atmosférica de Estados Unidos (NOAA, por sus siglas en inglés) se ha distanciado de él. La marca ha captado la atención mundial, incluso cuando la cifra —17.23 grados Celsius (63 grados Fahrenheit)— no parece tan caliente porque promedia las temperaturas de todo el mundo.
Aún así, los científicos afirman que el ritmo diario de los récords —oficiales o no— es un síntoma de un problema mayor.
“Los registros llaman la atención, pero debemos asegurarnos de conectarlos con las cosas que realmente importan”, dijo la climatóloga Friederike Otto del Imperial College de Londres. “Así que no creo que sea crucial qué tan ‘oficiales’ sean los números, lo que importa es que son enormes y peligrosos y no habrían ocurrido sin el cambio climático”.
El promedio del planeta del jueves superó la marca de 17.18 grados Celsius (62,9 grados Fahrenheit) establecida el martes e igualada el miércoles, según los datos del Reanalizador Climático de la Universidad de Maine.
Hasta el lunes, ningún día había superado la marca de los 17 grados Celsius (62,6 Fahrenheit) en los 44 años de registros de la herramienta. Ahora, toda la semana que terminó el jueves promedió al menos esa cantidad.
El sueco Johan Rockstrom, director del Instituto Potsdam para la Investigación del Impacto Climático en Alemania, calificó la marca de 63 grados Fahrenheit como “un valor atípico excepcional” que es casi 6 grados más cálido que el promedio de los últimos 12.000 años. Aseveró que “es muy probable que se traduzca en extremos aún más severos en forma de inundaciones, sequías, olas de calor y tormentas”.
El promedio de esta semana incluye lugares que están sofocados por un calor peligroso, como Jingxing, China, donde se registraron casi 43,3 grados Celsius (110 grados Fahrenheit), y lugares inusualmente cálidos, como la Antártida, donde las temperaturas en gran parte del continente superaron en 4,5 grados Celsius las normales esta semana.