1 enero 2024
México.- Una demostración de músculo juvenil, una parada militar al ritmo de Panteón Rococo y Los Ángeles Azules, una multitudinaria asistencia zapatista, nacional e internacional y un mensaje contundente: “La propiedad debe de ser del pueblo y común, y el pueblo tiene que gobernarse a sí mismo”, dijo el subcomandante Moisés, vocero del Ejército Zapatista de Liberación Nacional (EZLN), jefe militar de origen tsetal, organizador de pueblos y responsable de explicar hacia dentro y hacia fuera los siguientes pasos de su lucha.
“Lo común” fue la frase más nombrada durante las dos jornadas de celebraciones. A explicarla dedicaron obras de teatro, canciones, bailes y poesías corales. Un rotundo “Estamos solos, como hace 30 años”, dio cuenta de la realidad que viven y sienten, pero dejó abierta la puerta para su insistente convocatoria a la organización. “Invitamos a los hermanos a que si quieren venir compartamos nuestras ideas, a ver cuál es la más mejor para la vida. Nosotros lo que estamos diciendo es que quien trabaja, come, y quien no trabaja que coma su billete y su moneda, a ver si con eso se satisface su necesidad de hambre”.
El paradójico espíritu de paz de un ejército que se alzó en armas por libertad, democracia y justicia quedó nuevamente manifiesto. “No necesitamos matar a los soldados y a los malos gobiernos, pero si vienen, nos vamos a defender”, dejó claro Moisés, en un evento en el que no hubo una sola arma, aunque sí miles de uniformados con pantalón verde y camisa café, indumentaria de la milicia zapatista.
A las 22:30 horas del último día de año inició la conmemoración del 30 aniversario del levantamiento armado de los pueblos mayas de Chiapas. Luego de un inusual, alegre y festivo desfile de miles de milicianos y milicianas zapatistas pertenecientes a una generación que seguramente nació 10 años después del alzamiento, el subcomandante Moisés inició su mensaje político en tseltal, hablando antes que nada a la masiva concentración de bases de apoyo que se trasladó al Caracol de Dolores Hidalgo, creado sobre tierras recuperadas e inaugurado hace apenas tres años.