9 Junio 2022
México.- Trabajadores recuperaron decenas de cuerpos de los escombros de edificios destruidos en una «interminable caravana de muerte» dentro de la devastada ciudad de Mariúpol, informaron funcionarios locales, mientras los temores de una crisis mundial de alimentos aumentaban ante la incapacidad de Ucrania para exportar millones de toneladas de cereales debido al bloqueo en sus puertos.
Al mismo tiempo, las fuerzas rusas y ucranianas escenificaron intensos combates por el control de Sievierodonetsk, una ciudad que se ha convertido en parte central de la campaña de Moscú para controlar la región industrial del este de Ucrania conocida como el Donbás.
El costo humano de la guerra continúa acumulándose a medida que se prolongan los combates. En muchos de los edificios de Mariúpol, los trabajadores encuentran entre 50 y 100 cuerpos en cada uno, según un colaborador de la alcaldía en la ciudad portuaria que se encuentra bajo control ruso.
Petro Andryushchenko dijo en Telegram que los cuerpos son trasladados en una «interminable caravana de muerte» hacia la morgue, fosas comunes y otros lugares. Al menos 21.000 civiles de Mariúpol murieron durante el asedio ruso de varias semanas, según estimados.
Las consecuencias de la guerra se resienten más allá de Europa oriental, debido a que los cargamentos de cereales ucranianos continúan sin poder salir del país, elevando los precios de los alimentos.
Ucrania, conocida desde hace tiempo como «el granero de Europa», es uno de los principales exportadores de trigo, maíz y aceite de semilla de girasol a nivel mundial, pero buena parte de ese flujo se ha visto interrumpido por la guerra y el bloqueo ruso en la costa ucraniana en el Mar Negro.