8 Marzo 2022
México.- Organizaciones civiles y colectivos de mujeres señalan que el 8 de marzo, Día Internacional de la Mujer, no hay nada que celebrar, pero que sí es un motivo para alzar la voz para frenar la creciente violencia de género.
Delitos como feminicidio, trata de personas, violación, acoso sexual y violencia intrafamiliar reportaron incrementos de 2020 a 2021, entre 2% y 28%.
El homicidio doloso se mantuvo, en promedio, con más de 2 mil 700 crímenes contra mujeres durante los dos últimos años.
Según el Secretariado Ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Pública (SESNSP), el año 2021 cerró con 969 feminicidios, 20 más que en 2020. Es decir, un aumento de 2.1%.
Las mujeres víctimas de trata sumaron, en el año 2021, 503, un aumento de 10.8% respecto al año anterior, 2020, cuando se contabilizaron 454.
Además, la violencia intrafamiliar contra ese sector pasó de 220 mil 31 casos, en 2020, a 253 mil 736, en 2021, un alza de 15.3%.
El delito de violación se disparó de 16 mil 544 registros, en 2020, a 21 mil 188 el año pasado, mientras que en ese lapso el acoso sexual pasó de 8 mil 736 a 9 mil 505, un aumento de 8.8%.
Las lesiones dolosas también aumentaron en 2021, al pasar de 57 mil 495 a 62 mil 362.
«No hay nada que celebrar, más bien existen muchos reclamos por parte de las mujeres, pues sabemos que la violencia va al alza en nuestro país, las cifras lo confirman», dice Pilar Vázquez, presidenta del Colectivo de Mujeres Libres y Soberanas.
La activista destaca que con el inicio de la pandemia de Covid-19 se «destapan a nivel global las violencias contra las mujeres, principalmente las que se sufren en casa y en lo laboral».
En los últimos tres años, afirma, las mexicanas se han visto violentadas en sus derechos, pues se han desmantelado programas que favorecían al sector.
Argumenta que se tendrán que realizar las marchas que sean necesarias para disminuir los índices de feminicidio y ataques contra las mujeres.
Sin embargo, externa su desacuerdo contra los ataques y pintas contra inmuebles y negocios, pues, dice, se apartan de la esencia del 8M.
Entrevistada por separado, Carla Torres, dirigente del Colectivo Libres y Combativas, asegura que el Día de la Mujer no es un festejo, sino una reafirmación para luchar por decidir el rumbo de sus vidas y sus derechos.
«Los ejes a perseguir son combatir la precarización laboral, pelear por la igualdad salarial, que no haya más desaparecidas y feminicidios. Terminar con el tema de acoso en el trabajo, las violaciones y todo tipo de violencia machista», refiere Carla.
Considera que es importante tomar posiciones políticas y salir a la calle de forma unificada para tomar acción ante las demandas que no han sido escuchadas por las autoridades.
Por su parte, Natalia, una de las fundadoras del grupo Buscaminas, sostiene que el 8M «es un día para concientizar, para reflexionar y para escucharnos».
Para la fundadora de Buscaminas, las vallas colocadas en Palacio Nacional y otros recintos en la Ciudad de México son un reflejo de la actual administración frente a la violencia contra las mujeres: «Es como levantar un muro entre el Ejecutivo y la problemática real que enfrentamos».