27 septiembre 2023
México.- Seguirá Mario encabezando el “guiñol” en Morena
En el Zócalo capitalino, en el marco de las primeras manifestaciones de repudio ante la violenta desaparición y/o asesinato de 43 estudiantes de la Normal Rural Raúl Isidro Burgos de Ayotzinapa —ayer se cumplieron nueve años del lamentable suceso—, un altísimo personaje de la hoy fracasada 4T aseguraba, indignado, que lo ocurrido en Guerrero había propiciado la muerte de la izquierda histórica en el país y el nacimiento de una nueva opción de ésta, mucho más radical y antidemocrática.
Horas antes, en efecto, tanto el ahora exfuncionario del gobierno de Andrés Manuel López Obrador había atestiguado cómo, en el marco de la primera reunión masiva de repudió a lo sucedido en tierras guerrerenses, el incuestionable líder moral entonces de la izquierda Cuauhtémoc Cárdenas Solórzano había sido obligado a dejar la plaza en medio de acusaciones de “traidor” y “cobarde” y bajo una auténtica lluvia de toda suerte de objetos lanzados en su contra por miles de activistas, estudiantes altamente radicalizados, la mayoría, provenientes de todo el país.
Era el 8 de octubre de 2014, un par de semanas apenas después de los lamentables acontecimientos que aún ayer movilizaron a miles de mexicanos y a los padres de familia de los jóvenes “desaparecidos” que, otra vez, desestimaron la “nueva verdad histórica” construida por autoridades lideradas por el cuestionado Alejandro Encinas en los últimos cinco años y, curioso, 26 años después de que el denostado “ingeniero” había encabezado, junto con el extinto Porfirio Muñoz Ledo e Ifigenia Martínez de Navarrete, el abandono de las filas del Revolucionario Institucional (PRI) que, luego, daría paso a la fundación del PSUM-PRD que, en su momento, tocó presidir al tabasqueño que acabó escindiéndolo para dar forma al morenismo de su incuestionable propiedad…
¿Murió en verdad la izquierda histórica mexicana a consecuencias de los lamentables sucesos de Ayotzinapa?, no es fácil afirmarlo, pero sí que, merced a los mismos y en especial al rápido posicionamiento de una nueva izquierda, hoy más que nunca, el país enfrenta la consolidación de una izquierda altamente ideologizada y radicalizada para quien, al más puro estilo del priismo de donde provienen muchísimos de sus actuales dirigentes, la consolidación y/o ampliación de la democracia participativa no parece ser prioridad.
Al tiempo…
ASTERISCOS
* Apenas inició la semana, el senador Alejandro Armenta había formalizado ya su registro como aspirante a la candidatura del oficialismo a la gubernatura en su natal Puebla, donde, valga destacar, su principal contrincante no será otro que su impresentable par en diputados Ignacio Mier, quien, ayer, hizo lo propio. No será una puja sencilla, seguro.
* Si bien la maniobra de Ricardo Monreal de apostar por impulsar a su contralor senatorial Andrés Lozano al Consejo de la Judicatura ya fracasó, lo cierto es que la misma causó tal desazón entre los legisladores morenos en la Cámara alta que aún hoy celebran la imposición desde Palacio de Celia Maya, tan impresentable ella como él. Ni uno ni la otra.
Veámonos el viernes con otro asunto De naturaleza política.