4 de mayo de 2018
Si de prioridades se trata, como obviamente ocurre en los tiempos que corren, Andrés Manuel López Obrador decidió, ya que ni Jalisco ni Yucatán ni Guanajuato, en ese orden, están entre los territorios donde esté pensando “apostar más allá de lo estrictamente necesario…”, aunque en la segunda y tercera de las entidades, el objetivo es ubicarse como segundo en la captación de votos… en la presidencial primero, y en la de gobernador y/o legisladores federales después.
Y esto, no sólo por el obvio rezago que muestran sus candidatos en la puja por los gobiernos que ahora lideran los priistas Aristóteles Sandoval y Rolando Zapata, o el panista Miguel Márquez en su caso, sino, esencialmente, porque aun reconociendo la importancia de tales estados, en cuanto que “surtidores de votos”, la posibilidad de ganar en Tabasco, de Arturo Núñez, Morelos, de Graco Ramírez y Chiapas, de Manuel Velasco, o la importancia que por su padrón de potenciales electores representan la Ciudad de México, de José Ramón Amieva, Veracruz, de Miguel Ángel Yunes, y Puebla, de Antonio Gali Fayad, llevaron ya al tabasqueño y sus más cercanos a enfocar “todas sus baterías…” en la conquista de estas entidades de las que, en un primer momento estiman lograrán el triunfo en cinco o, incluso, en todas…
Merced a esto, precisamente, es que para no pocos es dable pensar que si bien Andrés Manuel López Obrador y los principales liderazgos del Movimiento Regeneración Nacional
—Yeidckol Polevnsky, Marcelo Ebrard, Ricardo Monreal o los Pejecitos, entre otros— mantendrán la estrategia de visitar cuanto territorio les sea posible, no deberá llamar la atención constatar cómo tanto su personal presencia como la de los citados, se multiplican de manera importante en el grupo de estados considerados parte de la denominada “Opción A”.
Una decisión, ésta que, huelga destacar, apuesta por captar la mayor parte —“arrasar” es el término que utilizan— de los más de 23.9 millones de sufragios susceptibles de ser depositados en las urnas a instalar en los estados incluidos en la opción preferente, el “segundo mejor cómputo” en dos, de las citadas inicialmente y, “en el mejor de los casos” el tercero en el territorio donde, prácticamente, todos los sondeos y encuestas favorecen al aspirante por parte de Morena.
El cálculo detrás de esta decisión es que apoyados en el previsible triunfo del candidato moreno en el Estado de México, particularmente, y otras entidades del sur de la República, más una cosecha inédita en algunos estados del norte y del centro, le garantizarán el triunfo en la puja por la Presidencia, eventualmente en media docena de gubernaturas y en número nada despreciable de posiciones en el Congreso federal.
ASTERISCOS
* Sintomático para muchos panistas-panistas que en su momento fueron desplazados del equipo de campaña deRicardo Anaya, con el argumento de que se requerían los espacios para Jorge Castañeda y Rubén Aguilar, exfoxistas de izquierda ambos, que ninguno de éstos participe ahora en la toma de decisiones y, ni siquiera, tengan un lugar permanente —“aunque no fuera destacado…”— en el “cuarto de guerra” del queretano.
* ¡Vaya ruidosa celebración! la que, en Pachuca, provocó el arribo de René Juárez Cisneros a la presidencia del Revolucionario Institucional, en sustitución del etéreo Enrique Ochoa Reza. Si alguien pensó que el festejop tuvo algo que ver con que el ahora mandamás tricolor fue antes subsecretario de Gobernación con Miguel Ángel Osorio Chong… ¡atinó!
*Aunque con menos ruido, valga decir, otro hidalguense que ayer estuvo de plácemes fue el director general del Instituto del Fondo Nacional de la Vivienda para los Trabajadores, David Penchyna, quien, con el jefe del Ejecutivo como invitado, inauguró la Cumbre Infonavit 2018 y celebró la entrega del crédito número diez millones de la entidad tripartita
Veámonos el domingo, con otro asunto De naturaleza política.
Twitter:@EnriqueArandaP