Domingo 7 de Junio de 2020
11.9%, tasa de letalidad aquí… en el mundo 5.9%
SS
Cien días exactos después del registro de la primera víctima del covid-19 en el país, el 27 de febrero, cuando se multiplican las evidencias de que la crisis sanitaria y económica provocadas por la pandemia amenazan con salirse de control de manera permanente —“cuando no lo está ya”, a decir de no pocos—, dejando una estela aún mayor de dolor y muerte a todo lo largo y ancho del territorio, y millones de familias más sumidas en la pobreza, la crispación y proclividad al enfrentamiento social alentadas desde el más alto nivel gubernamental amenazan arrasar con la tranquilidad y paz sociales.
Lo ocurrido el jueves en Jalisco y ayer en la capital es apenas el inicio, un mal augurio de lo que podríamos vivir en las próximas semanas y meses de no abrirse canales de diálogo y búsqueda de consensos entre Andrés Manuel López Obrador, y sus acríticos seguidores, con los gobiernos estatales o municipales, con sectores claves como el empresarial, el científico, cultural, universitario o eclesiástico, por citar sólo algunos, para avanzar en la adopción de una estrategia común que posibilite superar ya el entorno de crisis prevaleciente y, en serio, emprender la reconstrucción social y económica de lo mucho que se ha perdido en el marco de la contingencia.
Pensar como parece sucede ahora que un gobierno, cualquiera que sea su origen partidista y definición ideológica, puede omitir involucrarse y dejar de aplicar la ley ante excesos policiales como los que, se afirma, privaron de la vida al joven Giovanni López, en Ixtlahuatlán de los Membrillos, Jalisco, es tan absurdo e inaceptable como justificar que se omita actuar en contra de grupos de vándalos anarquistas cuyo único propósito es atacar y saquear comercios, destruir oficinas, monumentos y propiedades públicas o privadas, sembrar el caos. Con la ley en la mano entonces, igual el emecista Enrique Alfaro Ramírez que la morena Claudia Sheinbaum Pardo deben actuar y evitar se violente la ley y se tome a la sociedad como rehén…
Pretender, pues, cerrar los ojos ante una injusticia obvia, o ante excesos cometidos por quienes, presuntamente, “reman en la misma dirección…” que la autoridad, no sólo es inaceptable y contrario a toda ética sino, en esencia, es un acto que ignora en los hechos el propio compromiso de aplicar la ley y defender los derechos de la población asumido ante ésta.
Apostar ahora a la polarización social es, en el mejor de los casos, hacerlo contra México…
asteriscos
* No acaba aún de desempacar sus cosas en Guadalajara, y la depuesta exdirigente de Morena, Yeidckol Polevnsky podría estar comenzando a pensar en reservar el vuelo que la devolverá a la CDMX, pues ni el lopezobradorismo militante ni, menos, la dirigencia que de su “retiro estratégico” controla el impresentable Carlos Lomelí parecen dispuestos a dejar que se quede…
* Desde mediados de mayo, como referimos aquí en su oportunidad, las autoridades capitalinas, en particular la cuestionada secretaria de Gobierno, Rosa Icela Rodríguez, habría asegurado a la jerarquía católica en la capital que, en un marco de pleno apego a restricciones sanitarias, los templos podrían abrir sus puertas al cierre de ese mes… hoy la fecha tentativa es junio 15. Veremos…
Veámonos aquí mañana, con otro asunto De naturaleza política.